Posted by : Unknown
viernes, 13 de febrero de 2015
-¡Gracias por tu trabajo!-
-¡Gracias por tu trabajo, Misa-chan!-dijo la gerente al final de un arduo día de trabajo.
-¿Lista? - pregunto Usui a Misaki
-S-si- respondió ella tímidamente
-Entonces, vámonos a casa-
Misaki estaba a punto de irse acompañada de Usui, cuando sintió la mirada de todas sus compañeras en su espalda.
-Ummm...- siento sus miradas por todos lados- con su permiso, ya me voy- murmuro nerviosamente al mismo tiempo que se acercaba a la puerta.
-¿Eh? Ah, si- dijo Erika un poco ida.
-¡Aburridooo!- exclamo Honoka sentada en una esquina de la mesa- ¿no van a casa tomados de las manos?-
-¡¿Eh… porque haríamos eso!?- pregunto Misaki sorprendida- no voy a hacer eso- pensó
-Deberíamos - la interrumpió Usui - después de todo somos novios, ¿no? - Pregunto tomándola de la mano - vayámonos tomados de las manos, como siemprefinalizo con voz melosa.
-¡Que…! - Exclamo - ¡QUE DEMONIOS TE PASA IDIOTA! ¡MALDITO ALIENIGENA PERVERTIDO!-
-Aja…- bufo él ignorándola mientras abría la puerta.
-¡DEJAME IDIOTA!-
-Aja…-
-SIEMPRE… ¡SIEMPRE TE LA PASAS HACIENDO COSAS VERGONZOSAS! ¡¿PORQUE?!- se le escucho gritar a la pobre Misaki ya fuera del café -¡¿Es que acaso te divierte verme sufrir?!
- pregunto tratando de alejarse del rubio.
-Ummm…- musito pensativo con una mano en la barbilla. Luego de pensarlo por un instante, él volteo a verla y risueñamente dijo - Sip, y mucho-
-Usui, tu…- susurro con una mirada peligrosa - te voy a… ¡ah, maldición!- exclamo parando repentinamente.
-¿Que pasa Ayuzaw a?- pregunto intrigado y a la vez sorprendido por su repentino cambio de humor.
- Olvide mi libro de biología - murmuro Misaki molesta
- ¿Y es muy importante?
- Por supuesto, tengo que estudiar - aseguro la castaña.
- Si es tan importante, entonces vamos por el-
Ambos se devolvieron al café, y cuando abrieron la puerta se encontraron una situación un tanto extraña: la gerente se encontraba en el piso desmayada, y las demás chicas estaban a su alrededor tratando de que reaccionara.
- Gerente…- murmuro Misaki con la frente sombreada de azul.
- Kaichou creo que lo mejor es que busquemos tu libro y nos vallamos- sugirió el rubio casi tan extrañado como ella.
- Umm, si…-
Tratando de ignorar aquella extraña situación se dirigieron hacia los vestidores. Mientras Misaki rebuscaba entre sus cosas no pudieron evitar escuchar la rara conversación que estaban llevando a cabo las chicas.
-… Creo que en verdad, oficialmente están saliendo- comento Subaru.
-No puedo creer que no hubiesen salido sino hasta ahora- continuo Erika.
-Creo que están hablando de nosotros - le susurro Usui a Misaki para no ser descubiertos.
- Aunque me siento feliz, también un poco solitaria… justo como pensé, no aguanto una relación incompleta- dijo la gerente.
- Creo que la gerente ya despertó - agrego Misaki con una gota de sudor resbalando por su frente.
-Ya son un par de amantes interminables- suspiro Subaru.
-Coqueteando en todo momento- comento Erika alegremente.
- Me pregunto si ya **** - pregunto Honoka inocentemente (N/A: si te preguntas porque lo ponemos de esta manera, es porque en el manga tal cual y como lo leímos se encuentra censurado. Y si también te estas preguntando si nos estamos refiriendo a "ESO", si es "ESO".)
- ¡NOOOOOOOOOOOOOOOO! - grito Satsuki de repente.
La pobre Misaki que se por cierto se encontraba completamente roja, no podía creer que ellas estuvieran pensando que… ni siquiera podía pensarlo con claridad.
Usui en cambio se encontraba extrañamente tranquilo, con una expresión difícil de descifrar.
-¿Qu…que pasa gerente? - escucharon como le preguntaban a Satsuki.
-No quiero la imaginación- dijo la gerente con voz tétrica- quiero la delusión (N/A: Delusión: idea falsa fija, con resistencia a ser modificada aunque datos objetivos la contradigan.)
-Como demonios espera que…- trato de decir Erika.
-El siguiente paso después de ser amantes… si, tiene que ser el como te aproximas a la otra persona…-
-¿Que demonios le pasa?- susurro Misaki toda traumada.
-Que idea tan… interesante- murmuro el rubio.
-¡Usui!- exclamo la castaña en un susurro toda sonrojada.
-¿Qué? No es tan mala idea-
- Tu… ¡¿como puedes pensar en esa clase de cosas en un momento como este alienígena pervertido?!-
-Tranquila kaichou, nos estamos perdiendo de toda la conversación, mire- dijo señalando a las chicas.
-¡Aaaaaw w w w seria tan moe!- grito la gerente.
-Emocionarse por algo tan trivial…- susurro Subaru.
- Como se esperaba de la gerente- comento Erika.
- Porque Misa- chan dijo "Takumi" ¿que no lo ven? - siguió diciendo la gerente.
- ¿Qué tiene que diga tu nombre? Realmente no entiendo cual es el punto- dijo Misaki desordenando su cabello.
- No veo cual es el problema… es mas, si deberías decirme por mi nombre, ya que somos novios- musito tranquilamente.
- En realidad no veo porque le dan tanta importancia- mascullo la castaña encogiéndose de hombros confundida.
-¡Ah! ¡Así que eso es!- le escucharon decir a Erika captando la idea- me pregunto si las delusiones la gerente con algo así…-
-Que interesante las ideas que tienen las muchachas del café sobre nosotros- murmuro Usui pensativo.
- ¿En serio te parece interesante eso?- pregunto señalando a las chicas. Ambos se sorprendieron cuando al voltear a verlas sen encontraron a Erika muy muy cerca de Subaru, casi encima de ella.
- Misaki ven aquí - Susurro Erika de forma sensual.
-¿Eh? ¿Ah yo hago de Misaki- chan?- dijo Subaru sorprendida.
Tanto Usui como Misaki estaban totalmente perturbados con la frente sombreada de azul. Por su parte Misaki estaba en shock, ¿como era posible que…?… ¿ellas pensaran en…?. No podía pensar coherentemente. Tan sorprendida estaba que por poco no notaba que Usui estaba saliendo de su escondite.
- ¿Qué te sucede? ¿Estás loco? - tomo su camisa y se dirigió con el rubio hasta el fondo de los vestidores, quedando ella entre la pared y el. - ¿quieres que nos descubran?
- Es que quiero que me aconsejen, se ven muy dispuestas a ayudarme- respondió tranquilamente.
- Estupido alienígena pervertido, ¡no quiero que nos encuentren aquí! - lo regaño Misaki. Iba a seguir con su sermón cuando sintió a Usui demasiado cerca como para considerarse normal en esa situación - ¿Oye que estas…?-
Usui clavo sus labios en los de ella en un fogoso beso, tomándola por la cintura. La castaña estaba tan sorprendida que si podía reaccionar.
-Usui…- susurro sonrojada.
-Recuerda que me debes llamar por mi nombre- la interrumpió juntado sus frentes mirándose directamente a los ojos.
-Pero Usui…-
-Di mi nombre Misaki- pidió.
- Ta…Taku… - estaba nerviosa y sorprendida por el giro repentino de la situación. No sabía como detener lo que estaba pasando. Le parecía tan raro que Usui la llamara por su nombre y que le pidiera que hiciera algo tan trivial pero tan poco común, a la vez tampoco era que le idea le desagradara demasiado. Tomo un
respiro tratando de calmarse para decir su nombre y terminar con eso de una buena vez, pero al momento que tragaba aire para continuar, sintió una calida mano tomando su pierna.
-¿Pero que…?- la volvió a interrumpir Usui con otro beso. Cuando se detuvieron Misaki tenía la respiración rápida y parecía estar a punto de desmayarse.
- Misaki- volvió a llamarla otra vez por su nombre- trata de calmarte- a pesar de lo que decía el rubio, no ayudaba en nada con el caos que era la mente de la castaña. El al darse cuenta de lo ida que estaba agarro ventaja de eso, tomando la otra pierna de Misaki y terminando de ponérselas en su cintura para así
estar mas cómodo.
- ¡Hey…!- intento decir la castaña. Ahora sus rostros estaban todavía más cerca gracias a que ahora Usui no se tenía que inclinar.
- Misaki di mi nombre- pidió con voz suave pero firme.
- Ta… Takumi- logro decir antes que los labios de el silenciaran los suyos.
Misaki había tirado todas sus barreras.
Los labios del rubio bajaron por su garganta hasta el inicio de su clavícula. Misaki intento reprimir un gemido que salió como una especie de quejido por los besos que Usui estaba dejando allí. La castaña cada vez más sonrojada, abrazaba a Usui con fuerza, mientras daba pequeñas caricias en su cuello que lo hacían estremecerse. Usui complacido apretó con más fuerza la cintura de su compañera. Misaki tocaba todo lo que le permitía la camisa del rubio, lo cual no era mucho.
Quería sentir su amplia espalda y su duro pecho, nunca había sentido esa curiosidad pero en un momento así es la mejor oportunidad.
Empezó a desabrochar poco a poco los botones de la camisa de Usui, tenía los ojos cerrados, un poco temerosa de perder el coraje si los abría. Sintió una mano en su mejilla dándole una caricia muy delicada, al abrir los ojos se consiguió con esos verdes, tan concentrados en su rostro que apenas si podía respirar. Usui
tenía las mejillas algo sonrojadas, no mucho, nada comparado con sus sonrojos, pero era lo suficiente para darse cuenta de lo adorable que se veía. Muy pero muy pocas veces el dejaba mostrar ese pequeño sonrojo que lo hacía verse de lo mas… normal.
Misaki tomo la camisa de él y jalo con fuerza haciendo que sus labios se unieran. Esto fue luz verde para el rubio, que sin esperar mucho procedió a desabotonar rápidamente la camisa de Misaki, antes de que ella lo detuviera; aunque la castaña no lo detendría, estaba muy ocupada con los demandantes labios de él y su
fuerte pecho.
Si no hubiesen estado tan ensimismados habrían escuchado el bullicio que se acercaba rápidamente.
-¡Ya les dije que yo no vi nada!- exclamo Aoi llegando a los vestidores con todas las chicas del café y la gerente detrás de él.
Se consiguieron con una escena que no pensaron que se conseguirían nunca, pese que hace poco estaban más que especulando sobre el tema. Usui estaba dándoles la espalda, aunque volteo la cabeza para saber a qué se debía el ruido. A Misaki solo se le veía su cabeza sobre el hombro de Usui y sus piernas envueltas en su cintura.
-Ustedes….- los señalo Aoi- Pero ustedes…- señalo a las chicas- ¡¿que acaso les pusieron hormonas en el café o qué?!-
Misaki no podía creer lo que pasaba, había estado a punto de… y lo peor… todas las chicas, la gerente y Aoi fueron testigos… esto no podía ser peor.
-Bueno ya no tenemos dudas de que si lo estaban haciendo- dijo con inocencia Honoka.
La gerente era la más tranquila pese a lo que todos creerían.
-¿Gerente?- pregunto Subaru mientras tocaba su hombro.
-Tan moe…- fue lo último que se le escucho antes de que se desmayara; con una hemorragia nasal cabe resaltar.
-¡Gerente!- Misaki salió de su aturdimiento, y se separo de Usui pensando que así prestarían más atención a la gerente desmallada que a su pequeño desliz.
-Eh… Misaki tu camisa…- señalo Erika notando su camisa desabotonada.
Misaki se dio cuenta que su camisa había sido abierta por cierto dueño de ojos verdes, dejando ver su camiseta. Procedió a abrochárselos, tan roja que le salía humo por las orejas.
Usui en cambio, estaba con la cabeza gacha en una esquina de la habitación, mientras se abotonaba uno a uno los botones que Misaki había abierto.
-Tan cerca…- susurro solo para él.
Veinte minutos después Misaki estaba sentada en mesa que se encontraba al lado de los vestidores, intentando calmarse. Tantos sentimientos y emociones en tan poco tiempo, estaban a punto de volverla loca. Vergüenza, nerviosismo, sorpresa y… deseo. Sip señoras y señores esta chica aquí presente, aceptaba el hecho de que ella sintió una gran decepción por haber sido interrumpidos, aunque claro, una cosa era reconocerlo internamente y otra muy diferente era decirlo a toda voz.
-¿Sucede algo?- pregunto Usui tomándola con la guardia baja.
-Sucede de todo si no te has fijado-
-La verdad es que no- confeso el rubio.
-¿Cómo que no? Nos acaban de encontrar en… - Misaki se sonrojo- bueno… a Aoi casi le da un ataque de pánico y gerente esta desmallada y con mucha pérdida de sangre-
-Yo no lamento lo que paso solo lamento la interrupción-
-Tu… alienígena pervertido… no volverá a pasar, eso tenlo por seguro-
-Pero Misaki…- intento razonar Usui
-No-
-Pero…-
-No-
-Está bien- acepto- aceptare tus términos con una condición-
-Está bien ¿y cuál es?- pregunto Misaki mirando la mesa sin mucho interés.
-Pues…- Usui le tomo el rostro y lo coloco a centímetros del suyo- que terminemos primero con lo que estábamos haciendo-
Misaki se sonrojo a más no poder indignada por lo que le dijo.
-¡USUI!- grito a todo pulmón.
-Ya sabes que me debes que me debes decir Takumi- respondió tranquilamente.
-Eh…tu… eres…- balbuceo la castaña sonrojada sin saber que decir, le dirigió una mirada acecina para luego cruzarse de brazos.
Tomándola completamente desprevenida, Usui le dio una pequeña caricia en la cabeza y algo sonrojado murmuro:
-Ayuzaw a me puede decir como ella quiera-
-Estúpido humano del espacio exterior- mascullo irritada
-Ya me lo esperaba - agrego con una sonrisa.